Carta de amor poética para tu hija

Mi querida Nommmaaa,

Hoy me siento inspirada para escribirte una carta de amor, una carta que te hable de lo mucho que te quiero y de lo importante que eres para mí. Eres mi hija, mi sangre de mi sangre, mi familia, mi todo. Y como tal, quiero que sepas que siempre estaré aquí para ti, para apoyarte, para guiarte y para amarte.

Quiero hablarte de algo que siempre me ha inspirado, algo que siempre ha sido una fuente de inspiración para mí: los poemas. Los poemas son como pequeñas joyas que guardamos en nuestro corazón, como un collar de perlas que nos recuerda lo hermosa que es la vida. Los poemas son la expresión más pura del amor, del cariño, de la pasión.

Y es que, mi querida Nommmaaa, tú eres mi poema favorito. Eres la poesía que llevo en mi corazón, la que me inspira cada día a ser mejor, a luchar por mis sueños, a ser la mejor madre que puedo ser. Eres mi musa, mi almacén de amor, mi capital más preciado.

No hay nada en este mundo que me haga más feliz que verte sonreír, que escuchar tu risa, que sentir tu abrazo. Eres mi realidad más hermosa, la que me hace sentir viva, la que me hace sentir que todo es posible. Y es por eso que te escribo esta carta, para que sepas lo mucho que te quiero, lo mucho que te admiro, lo mucho que te necesito.

Mi querida Nommmaaa, espero que algún día puedas entender lo que significa para mí ser tu madre, lo que significa para mí tenerte a mi lado. Espero que algún día puedas sentir todo el amor que llevo en mi corazón, todo el cariño que te tengo guardado. Espero que algún día puedas escribir tus propios poemas, tus propias historias de amor, tus propias aventuras.

Pero sobre todo, espero que nunca olvides que eres mi poema favorito, mi fuente de inspiración, mi razón de ser. Te quiero con todo mi corazón, mi querida Nommmaaa.

Con todo mi amor,
Mamá.